Por: Diana Hernández
Amy Winehouse
adquirió fama gracias a su hermoso registro vocal
capaz de transmitir sus sentimientos más íntimos, acompañada de una
poderosa agrupación que logró una mixtura sublime del soul, reggae, jazz y ska en pleno siglo XXI.
Desde muy pequeña cantaba junto a su padre y mostró un amor increíble por la música negra.
Poseía un talento elevado como su behivee y nos dejó tres fabulosos discos: Frank (2003), Black To Black, un material 100% biográfico, alcanzando la masificación mundial en el año 2006 y un álbum póstumo Lioness: Hidden Treasures, editado en el 2011, donde se destacan temas como The Girl from Ipanema, y por supuesto el clásico del real book del jazz Body and Soul, grabado a dúo con Tony Bennett.
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| Amy junto a Terry Hall y Lynval Golding The Specials |
Dentro del repertorio de la artista también se encuentra “The Ska EP” que contiene versiones de soul como Cupid del fallecido Sam Cooke, grabado en clave reggae, así como algunas piezas del ska Jamaiquino e inglés tales como Monkey Man de Toots Hibbert y You’re wondering Now de Andy y Joey, y un tema de la mítica banda The Specials, Hey Little Rich Girl. En diversos conciertos también interpretó el clásico Nelson Mandela y Ghost Town que pertenecen a la mencionada agrupación de los años 70.
Lastimosamente los medios de comunicación facilitaron su auge, pero también fueron implacables con su caída dándole importancia a su vida llena de excesos, lo cual no fue positivo para su carrera artística y mucho menos para su recuperación.
Para nadie es secreto que Amy tenía problemas serios de drogadicción y
alcoholismo producto de sus “vacíos” emocionales y que logró sublimar a
través de la música.
Entre las participaciones más destacadas se puede mencionar la que realizó junto a los británicos The Specials en el festival Glastonbury, coincidiendo con su regreso a los escenarios tras cumplir treinta años de su formación. Asimismo, la reconocida marca Fred Perry lanzó al mercado camisas, faldas y vestidos inspirados en la artista.
Otro de los aspectos positivos de Amy fue su colaboración en el desarrollo artístico de Dionne Bromfield, una joven cantante de soul , jazz y pop de origen británico que sorprendió a la audiencia por su registro vocal.
A pesar de sus intentos por rehabilitarse Winehouse dejó este plano un 23 de juñio del año 2011, ingresando así al conocido Club de los 27 en donde figuran otros artistas que fallecieron a su misma edad, como es el caso del multiinstrumentista Brian Jones de The Rolling Stones, el guitarrista Jimmy Hendrix, James Douglas Morrison, vocalista de la dionisiaca banda The Doors, la increíble Janis Lyn Joplin, y Kurt Cobain, de Nirvana.
La intérprete de You Know I’m No Good será recordada como una de las artistas más importantes de su tiempo,
que logró una amalgama única de R&B, el jazz y los sonidos
jamaiquinos. Murió en su propia ley, pero nos dejó un maravilloso
legado.
Adaptación de un artículo que escribí para http://www.vzlareggaezine.com/vrzw/tres-anos-sin-amy-winehouse/
